lunes, 6 de abril de 2009

El patrón oro

El último día de clase estuvimos hablando sobre el patrón oro, por tanto voy a explicar qué significa y como afectó en la evolución de la historia económica mundial.

Podríamos empezar diciendo que antes del patrón oro la gran mayoría de países tenían fijada la equivalencia de sus monedas con un patrón bimetálico. A finales del siglo XIX en 1870 las principales potencias abandonaron los patrones plata y se pasaran al patrón oro, ello facilitó la creación y el funcionamiento de un sistema monetario internacional de pagos de patrón oro.

La formación del sistema de patrón oro significó una importante mutación. A mediados del siglo XIX sólo Inglaterra y Portugal tenían un sistema monetario de patrón oro, el resto tenía un sistema monometálico o bien un sistema bimetálico. Sólo algunos países secundarios como España mantenían un sistema sin patrón.

Para evitar la desaparición total de la circulación de plata, las monedas de plata se acuñaron con un peso inferior a su patrón legal. Las causas del abandono de los patrones plata fueron varias y su importancia relativa ha sido muy discutida. El descubrimiento de nuevas minas de plata así como la adopción del procedimiento electrolítico de refinada de la plata hicieron que ésta se abaratara. Ante esta situación se emitieron monedas de plata de valores pequeños con un contenido inferior al legal, de modo que había en circulación monedas de plata reales de denominación alta y otras de denominación baja.

El pistoletazo de salida hacia el abandono de los patrones plata lo dio Alemania tras la guerra franco-prusiana aprovechando la fuerte indemnización de guerra, al mismo tiempo que al transformarse en imperio quiso cambiar la moneda de plata por una de oro. Para hacerlo vendió toda su plata a cambio de oro. Esta sobreoferta hundió más el precio de la plata.

Bajo mi punto de vista considero que la iniciativa tomada por Inglaterra y Portugal contiene aspectos a destacar pero también encuentro cosas negativas. Referente a lo positivo, creo que cualquier movimiento económico, social o cultural que se haga con el afán de homogeneizar los distintos países del mundo es bueno, porque en este caso el uso de un patrón común facilitaría mucho más las relaciones internacionales de manera que abriría un poco más el comercio internacional. Por contra, creo que algunos países no considerados potencias mundiales se verían perjudicados por este cambio, ya que podrían quedar desplazados por el hecho de no tener o no poder conseguir oro.

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